El cuidado de la salud bucodental durante la época gestacional cobra aún más relevancia. En la cavidad oral conviven un gran número de bacterias y cerca de 50% de las embarazadas desarrollan alguna patología bucal , pero que se pueden evitar con prevención.
Para evitar cualquier enfermedad periodontal es fundamental una higiene de los dientes, la mucosa, la lengua y los labios. La enfermedad periodontal es una afección que no está causada por el embarazo, pero la falta de una buena higiene oral y los cambios hormonales pueden empeorar una situación previa existente, por eso es fundamental realizar un tratamiento periodontal, porque la pérdida de hueso que podría producirse es irreversible, ya que no tratar la periodontitis de forma adecuada podría desencadenar alteraciones a nivel sistémico.
Durante el embarazo se sufren algunos cambios como aumento de progesterona y estrógenos, combinado con los cambios de la microbiota oral, los cambios hormonales y la disminución de la respuesta inmune, estos cambios pueden repercutir en la salud bucal.
Los profesionales de Clínica Dental IMOI aconsejan que las pacientes acudan a una consulta con el odontólogo para valorar la salud periodontal antes del embarazo. También es recomendable ir a revisión durante el segundo trimestre, porque ya se habrán formado todos los órganos del feto.
La paciente debes avisar al dentista que está embarazada, para que lo tenga en cuenta a la hora de elegir un tratamiento o de hacer una radiografía dental, aunque los efectos de la radiografía dental es poco probable que la radiación ionizante dental cause daños al feto.
“Una de las afecciones más frecuentes durante el embarazo es la gingivitis, que supone un incremento del flujo sanguíneo que provoca el enrojecimiento e inflamación de las encías, muchas veces acompañada de sangrado al cepillarse los dientes. La causa suele ser la acumulación de placa bacteriana, pero los cambios hormonales intensifican la respuesta de las mucosas. Con tratamiento periodontal temprano se puede evitar que derive en periodontitis”, explica el Dr. Miquel Àngel Jiménez, jefe de servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital Universitari Sagrat Cor.
Durante el embarazo también se producen cambios en la composición de la saliva, vómitos y aumenta la ingesta de comida, lo que puede provocar la aparición de caries, por eso es fundamental los tratamientos dentales concretos que reduce las bacterias en la boca y el riesgo de transmisión bacteriana al recién nacido.
¿Cómo puede afectar la salud oral al feto?
Hay estudios que indican que si una mujer embarazada padece gingivitis o periodontitis durante el embarazo (o antes), se eleva el riesgo adicional de preeclampsia, casos de parto prematuro o de bajo peso.
Los vómitos del embarazo afectan a la salud bucodental porque el ácido gástrico puede desgastar los dientes, también provoca la aparición de caries y sensibilidad dental. Es recomendable enjuagarse la boca con agua justo después de vomitar, y esperar media hora antes de cepillar los dientes con un cepillo suave.
La composición de la saliva se ve alterada al final del embarazo, esto puede provocar caries. Aunque una mujer embarazada no tiene porqué sufrir caries ni perder ninguna pieza dental, debe llevar una dieta más cuidadosa, una buena higiene dental y acudir al dentista.
¿Las caries en el embarazo afectan al bebé? Podrían afectarle si las bacterias en los dientes o muelas cariadas se transmiten hasta él o ella a través del torrente sanguíneo.
A partir del tercer mes de embarazo es muy común las encías inflamadas y sangrantes, aunque desaparece tras el parto, pero es recomendable consultar con el odontólogo la posibilidad de una limpieza bucodental, para evitar que pueda llegar a convertirse en una periodontitis.
Durante el embarazo se modifica la composición de la saliva y su cantidad. Es lo que se llama xerostomía o boca seca, debido a los cambios hormonales. Otras alteraciones que pueden salir son aftas o llagas, a causa de los cambios hormonales, falta de vitaminas, estrés, una bajada de defensas… Si no desaparecen en 21 días máximo, hay que acudir al dentista.
También puede aparecer un crecimiento excesivo en un lugar concreto de la encía, una respuesta inflamatoria causada por microorganismos orales.
Cómo conseguir una boca sana durante el embarazo
El Consejo General de Dentistas informa que lo más importante para prevenir la caries y la gingivitis es proceder a un minucioso cepillado dental con pasta fluorada al menos dos veces al día. No olvide la higiene entre los dientes con hilo de seda o cepillos interproximales. Su dentista le indicará cómo hacerlo correctamente y si usted necesita algún complemento adicional para su higiene.
Otros consejos para mantener una boca sana en el embarazo:
- -No consumir azúcares.
- – Llevar una dieta equilibrada, con fuentes de calcio.
- -Si vomita se debe enjuagar la boca con agua, para evitar que los ácidos estomacales afecten al esmalte dental.
- -Es mejor usar un cepillo suave y pequeño para evitar las náuseas.
- -Masticar chicles sin azúcar y con xilitol.
- -Acudir a las visitas rutinarias con el dentista para que compruebe que todo va bien.