Si eres madre primeriza seguro que te ha podido ocurrir como a mí y te habrás preguntado cuándo es el mejor momento para llevar a tu hijo al dentista.
Lo cierto es que son tantas las cosas nuevas que a veces tanta información acaba por abrumarte. No sé cómo se me fue pasando algo tan importante como la salud bucal de mi hijo. Siempre que tenía dudas recurría a mi madre y ella medaba la información y seguridad que a mí me faltaba.
No obstante, los tiempos han cambiado y, aunque en lo esencial muchas cosas siguen siendo igual que siempre, algunas, como la salud bucal, parecen haber cambiado con el tiempo.
Menos mal que un día quedé con una amiga que estaba más puesta en el tema y me comentó que lo mejor era llevara mi bebé cuanto antes y que ni se me ocurriera pasar por alto las revisiones dentales cuanto antes.
Por alguna razón pensaba que no era necesario hasta después del primer año, si bien, la mayoría de los odontólogos, sin embargo, recomiendan iniciar la higiene bucal a una edad muy temprana, incluso antes de que aparezca el primer diente.
Antes se solía recomendar por parte de los pediatras la primera revisión dental cuando la dentadura de leche, compuesta de 20 dientes, estuviera completa, es decir alrededor de los 3 años.
De hecho, cuando se lo comenté a mi madre me dijo que ella me había llevado por primera vez al dentista a los 3 años.
No sé si la miré sorprendida o echándole la culpa de las muelas que había perdido pero lo cierto es que bastantes cosas han cambiado desde que era niña.
Ahora, la presencia de caries en los preescolares y la aparición en niños menores de 3 años ha forzado a los especialistas a cambiar esta recomendación a los 12 meses.
Así, revisar los dientes y encías, ver si existe caries del biberón, o evaluar si existen problemas como mordida cruzada, abierta o alteraciones de crecimiento con el que se iniciará un historial sobre antecedentes médicos y dentales del niño.
Corregir Malos Hábitos lo Antes Posible
Lo mejor, en definitiva, siempre es tratar de prevenir y corregir malos hábitos e introducir desde temprano más hábitos de limpieza.
Por ello, conviene habituarse a examinar los dientes del bebé regularmente. Por ejemplo, si tu bebe tienen un color blanco uniforme, esto indica que tienen una dentadura saludable, pero si ves manchas o puntos en los dientes es recomendable adelantar la visita al dentista.
Por otra parte, lo mejor para prevenir caries en los dientes de leche es mucha higiene, algo que hacía mal y he dejado de hacer después de que me lo señalaron los especialistas de Dental Morante, una clínica de Madrid con más de 30 años de experiencia cuya filosofía se basa en la máxima especialización de sus profesionales.
Me indicaron que no dejara el biberón en la boca de mi hijo, pues el contacto prolongado con los azúcares de le leche predispone a la aparición de caries.
Seguí sus indicaciones y visitas periódicas, pero la verdad que esto del primer hijo debería de venir con un completo manual de instrucciones y kit de supervivencia complementario.